Renovación

El sábado pasado, los que se animaron a venir a misa por la tarde, pudieron aprender a andar en zancos. Este sábado, los que se animaron a venir temprano, pudieron construir sensacionales barriletes, más conocidos como "cometas" (¡qué lindos volantines!", dijo el Padre Adrián. Pobre, él es de San Juan y no habla bien nuestro idioma).
En la imagen de abajo, vemos a David remontando uno de los que mejor quedó:



¡No te olvides que el fin de semana del 5 y el 6 de setiembre tendremos nuestra Convivencia! ¡Pedí permiso! Será desde el sábado a la mañana hasta el domingo a la tarde. Eso significa que...
* vas a tener que hacer los deberes y estudiar el viernes a la tarde, o antes, si es posible...
* vas a tener que portarte bien en casa para que te dejen venir...
* vas a tener que portarte muy mal para que te echen de la casa y puedas venir aquí...
* vas a tener que traer la autorización que te dimos hoy firmada para el sábado que viene...
* si no pediste la autorización, o no viniste hoy, vas a tener que pedirla sin falta el próximo sábado...
* vas a tener que renunciar un fin de semana al ciber, a la televisión, a salir con amigotes que no sean del Oratorio, y a todas las otras cosas que ocupan tu tiempo habitualmente los sábados por la tarde y los domingos todo el día.
¡Es la única oportunidad en el año de hacer algo así! ¡No faltes!

Otra cosa: ¡felicitaciones a los ganadores de los súper regalos de Córdoba! Hoy no llegamos a ser 150, como quería Chachi, pero sí fuimos unos cuántos más de 50. ¡Ánimo! Sólo nos faltan reunir 100 más. ¿Cuántos seremos el día de la Convivencia?

Dos sensacionales chistes para terminar:

En el restaurante el cliente muy enojado dice:
- ¡Mozo! ¡me tiró toda la sopa encima!
Y el mozo contesta:
- Toda no, señor. Tengo más en la cocina.

El novio le dice a la novia:
- Amor de mi vida, te quiero tanto que por vos atravesaría nadando el mar, escalaría la montaña más alta, enfrentaría la furia de cien huracanes, cruzaría la Antártida caminando pata pila...
La novia pregunta:
- ¿Y por qué ayer no viniste a verme?
- Es que estaba lloviznando...


Si querés leer el cuarto capítulo de la historia del duende, o todos los capítulos anteriores, hacé click aquí.

¡No dejes de ver los videos que aparecen abajo de todo! El lunes vamos a actualizar esta página.

Image Hosted by ImageShack.us

.

Comentarios

Entradas populares de este blog

Santos salesianos

El robot más bueno del mundo

Sensacional Oratorio de Verano