Rumbo a Tartagal

En el Colegio, con la ayuda de bastante gente, se recolectaron muchas cosas para llevar a Tartagal. El miércoles 4 de marzo, bajo la lluvia, nos pidieron que ayudáramos a cargar todo en una camioneta. En la foto, Matías, Gonzalo y Maxi (¡un explorador!) se esfuerzan por levantar el carrito en la galería de la Capilla. Lo que vemos es apenas una parte de todo lo recaudado.




Dos cosas para tener en cuenta:
1ª: El viernes 27 de marzo nos toca preparar un Vía Crucis en la Capilla. El año pasado, cuando tuvimos que hacerlo, éramos la impresionante cantidad de... ¡2 personas! Esperemos que en el 2009 podamos superar ese mínimo récord.

2ª: Si te corresponde preparar la charla del próximo sábado, el apasionante tema es el siguiente:

* En la Cuaresma Dios nos invita a la conversión, es decir, a cambiar la forma en que vemos a los demás, y en que vemos a nuestra propia vida ("conversión" significa "cambiar el punto de vista"). Se trata de que empecemos a mirarnos como hermanos, como hijos que caminan juntos al encuentro con un Padre que los quiere, aún en medio de caídas y sufrimiento (también en medio de momentos alegres).

* ¿Cómo podemos tener alguna certeza de que Dios de verdad existe y nos espera al final de la vida? Por supuesto, es una cuestión de fe, pero razonando con nuestra inteligencia podemos acercarnos a una respuesta (¡la inteligencia no se opone a la religión! Al contrario, la religión nos enseña que la inteligencia es un regalo de Dios, que nos hace parecidos a Él).
- Cuando vemos la inmensidad del mundo, de los planetas, de las estrellas, es fácil pensar que todo eso tiene que provenir de algo. ¿Quién ha creado todo lo que vemos? ¿De dónde vino? Si todo se originó en una minúscula partícula de materia comprimida hasta el infinito que en algún momento estalló (big bang) ¿qué había antes? ¿quién la creó? ¿quién la hizo estallar? Nuestra inteligencia nos dice que al comienzo de todo necesariamente debe haber habido alguien que quiso que las cosas fueran así. Las leyes de la física funcionan en el universo cuando este ya está creado, pero no son capaces de fabricarlo desde la nada.
- Todas las culturas y los pueblos del mundo entero, a lo largo de toda la historia humana, han sentido que la vida no se termina en la muerte, y han tenido la certeza de que el universo ha sido creado por alguien. Culturas tan diferentes como los esquimales y los beduinos del desierto han compartido estas creencias. Aunque fueran diferentes en todo lo demás, la idea de Dios y de la vida después de la muerte es común a todos. Este anhelo, escrito en lo más profundo del corazón de todos los seres humanos, y punto de unión de todos, no puede ser casualidad. Es una señal que alguien ha querido darnos para que nuestra vida tuviera esa apertura a otra realidad, distinta del mundo físico de todos los días. El hombre es un ser religioso por naturaleza. Por supuesto, puede elegir no creer en Dios, pero ese es un comportamiento que se aprende después, no es el que traemos naturalmente al nacer.

* Así, con la inteligencia podemos llegar a la certeza de que la idea de Dios no es contraria a nuestra razón. Ahora, por medio de la fe, podemos llegar a una convicción todavía mejor:
- Dios no solo ha creado el mundo, sino que es la fuente de todo lo bueno que vivimos aquí en la tierra (amor, amistad, compañerismo, alegría, fortaleza, esperanza). Todo lo bueno viene de Dios. Por eso, podemos sentir que es un Padre que nos quiere. Esta sí es una cuestión de fe, pero está comprobada por la experiencia de millones de personas. Cada uno de nosotros ha vivido situaciones de dolor y sufrimiento, y ha sentido de un modo concreto y cercano la presencia de Dios como un consuelo. ¿Cómo podemos negar esa evidencia?

* Entonces, tengamos la certeza de que creer en Dios no es una locura de chicos o de viejitas que ya no saben ni cómo se llaman. Tiene sentido creer en Él y dejarle un lugar en nuestra vida. Nuestra experiencia también nos enseña que viviendo en Gracia de Dios estamos más contentos, más alegres, con más fuerza para superar los momentos malos, con más empuje para hacer el bien a los que están cerca nuestro. ¿Por qué vamos a negarle a las personas que queremos todo lo bueno que les podemos dar si vivimos en amistad con Dios?

Bueno, es un tema bastante amplio, pero ideal para lucirse. Si no te tocaba a vos preparar la charla y aún así llegaste a leer hasta el final, te ganaste dos millones de alfajores.
¡Nos vemos!

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Comentarios

Anónimo ha dicho que…
He jejejejejejejeje miralo a Harry ayudando
Ja me paso nos vemossssssssssssssssssssssss
Nico diaz

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